Escuela Enrique Strachan: un modelo en sostenibilidad y gestión ambiental 

La Escuela Enrique Strachan, ubicada en Barva de Heredia, es un ejemplo de cómo las instituciones educativas pueden contribuir significativamente a la protección del medio ambiente, mientras impulsan la participación de estudiantes, docentes y familias en prácticas sostenibles. Bajo la dirección de Noelia León Brizo, esta escuela ha logrado integrarse exitosamente en el programa Yo Pienso Verde 2024, impulsado por la Sociedad de Seguros de Vida del Magisterio Nacional. Iniciativa que este año celebra su doceava edición, tiene como objetivo enseñar a las instituciones educativas cómo implementar buenas prácticas de gestión ambiental, abarcando desde la correcta gestión de residuos hasta la eficiencia en el uso de recursos como el agua y la electricidad. 

Una de las principales características de la Enrique Strachan es su enfoque integral en la gestión de residuos sólidos. Yo Pienso Verde les instruyó de manera sencilla pero efectiva, los estudiantes y el personal educativo aprendieron a separar residuos como el cartón, envases y orgánicos. Esta labor no solo se limita al aula, sino que se extiende a las casas de los estudiantes que son parte del hogar, gracias al compromiso de las familias. La población escolar está directamente involucrada en la educación ambiental, con las madres sustitutas de los estudiantes también desempeñando un papel clave en este proceso. 

Lo que distingue a esta institución dentro de este programa es su capacidad para involucrar a toda la comunidad educativa en la creación de espacios que promuevan el reciclaje y la sostenibilidad. Las aulas están decoradas con murales que educan sobre la correcta disposición de residuos y otras temáticas, promoviendo la reutilización de materiales.  

Además, la escuela forma parte del Hogar Bíblico Roblealto, que acoge a niños en situación de vulnerabilidad social, brindándoles no solo una educación de calidad, sino también los recursos necesarios para superar los desafíos que puedan enfrentar.  

“Nos complace apoyar a esta escuela para reducir sus impactos y fortalecer la protección del medio ambiente. Hace poco realizamos un voluntariado en la institución y nuestro esfuerzo se enfocó en el cuidado de sus áreas verdes, además de trabajar junto a los estudiantes de cuarto grado en temas ambientales como la eficiencia hídrica, el ahorro energético y la gestión de residuos”, comentó Ana Gabriela Soto, gestora ambiental de la Sociedad de Seguros de Vida.